Un nutriente esencial para la salud

El pasado 26 de noviembre recordamos el Día Mundial del Déficit de Hierro, y aprovechamos para destacar la importancia crítica de este nutriente esencial para el óptimo funcionamiento de nuestro organismo. Sorprendentemente, aproximadamente el 25% de la población mundial experimenta un déficit de hierro, lo que subraya la necesidad de concientizar sobre esta preocupante condición.

 

Es crucial reconocer que la deficiencia de hierro, incluso sin llegar a la anemia, debe considerarse de central importancia ya que este mineral desempeña un papel vital en diversos procesos que impactan la salud de manera integral. Su influencia se extiende a la función inmune, la salud mental, el embarazo, la calidad de vida de adultos mayores y la resistencia al ejercicio, entre otros aspectos fundamentales. Hay tres poblaciones especialmente susceptibles: niños/as menores de 24 meses, las mujeres en edad fértil por la pérdida menstrual -que presentan hasta un 40% déficit de hierro-, y las mujeres embarazadas -que suele ser hasta un 80%-, todos estos casos requieren tratamiento médico.

 

En este contexto, en nuestro instituto seguimos liderando iniciativas de investigación y educación para abordar el déficit de hierro y sus implicaciones en la salud. A través de este compromiso continuo, buscamos crear conciencia sobre la importancia de mantener niveles adecuados de hierro y fomentar prácticas saludables que contribuyan a la prevención y el tratamiento de esta condición.